Está muy bien pero...

Dentro de pocas semanas (o días) tendremos a nuestra disposición un nuevo tramo de carril-bici de más de un kilómetro que discurre paralelo a la carretera de Vecinos, entre los barrios de Vistahermosa y el Zurguén.


Este fin de semana nos hemos pasado por allí y la verdad es que ha sido una sorpresa muy agradable: Un espacio amplio, arbolado, iluminado en todo su recorrido y totalmente separado del tráfico de vehículos. Una calzada ancha en la que peatones y ciclistas podrán convivir y por la que resulta muy cómodo circular.

Y os estaréis preguntando, ¿Cuáles son los "peros"? Pues haberlos, los hay y son unos cuantos.

El primero de todos, el que podéis ver en las fotos: Aún permanecen en pie un grupo de casas abandonadas y en ruinas que interrumpen el recorrido del carril, que en un futuro girará a la derecha para atravesar bajo las vías del tren hacia el centro de Salamanca.

Más temas que me preocupan:

-El estado lamentable del valle del Zurguén. Lo que debería ser el gran pulmón de la ciudad, no es más que un secarral abandonado. Sólo se salvan las zonas más cercanas a las viviendas. No estaría de más una buena forestación de la zona.

-Se ha plantado una hilera de árboles a lo largo del carril, lo cual aplaudo. Sin embargo mucho me temo que la mayoría no prosperen bien por la época en la que han sido plantados o bien por carecer de los cuidados adecuados (No vi riego por goteo por ninguna parte)

-No se plantea ningún tipo de permeabilidad peatonal entre el propio barrio de Vistahermosa y esta zona. Considero que sería muy importante fomentar este tipo de desplazamientos y dar un carácter más urbano a la carretera de Vecinos. No puede ser un elemento de tráfico rápido ajeno a lo que sucede en sus márgenes.

-Se echa en falta mobiliario urbano como bancos y papeleras.

Aun así reconozco que es uno de los carriles-bici más cómodos que he probado y que siempre son bienvenidos en Salamanca, una ciudad que necesita muchas más infraestructuras de este tipo.