miércoles, 4 de abril de 2012

La ciudad que imagino

Imagino que todos los que andáis por Salamanca os habréis dado cuenta de la penosa situación del pequeño comercio en nuestra ciudad, agravada en los últimos años consecuencia de la crisis económica. Con todo y con eso el panorama es diferente según se camine por una u otra calle. No es lo mismo pasear por las grandes arterias comerciales y peatonales de la ciudad que por calles del centro más apartadas.

Este fin de semana he quedado escandalizado con la situación de la calle Pozo Amarillo. Cuando era pequeño esta vía era una zona comercial de primer orden, equiparable a la calle Toro. Tiendas como los almacenes "ARA" eran un referente para toda la ciudad y provincia y un hervidero de gente. Hoy prácticamente toda la calle está CERRADA. Silmos, Cuplé, Ache, Vosco Cocinas, Restaurante Roque... los últimos que han echado la trapa abajo y se han sumado a otros tantos establecimientos que ya lo hicieron antes. Da muchísima pena y una sensación de decadencia y abandono impropios del centro de una ciudad como Salamanca. Ojo, porque el problema es más serio de lo que parece: De la falta de actividad comercial, al abandono, a la inseguridad y a la marginalidad va UN PASO.

Y sí; podemos ponernos a analizar por qué una calle como Pozo Amarillo ha llegado a esa situación. Ya sé que es una calle oscura durante muchas horas del día (no mucho más que otras calles del centro) y que ha quedado apartada de los principales itinerarios peatonales que tienen como referencia la Plaza Mayor en la que muchos de ellos confluyen.

¿Qué piden los pequeños comerciantes del centro para mejorar su situación? Que la gente pueda pasar con sus coches, pueda aparcar cerca de sus tiendas y cuente con aparcamientos subterráneos en las inmediaciones. Si esta fuese la solución a los problemas del pequeño comercio charro, la calle Pozo Amarillo, con aparcamiento en superficie, paso de buses, taxis, zonas de carga y descarga y un aparcamiento subterráneo como el de Santa Eulalia a la entrada de la calle... sería la vía con mejor "salud comercial" de todo el centro de la ciudad, pero no, todo lo contrario: Languidece.

A lo mejor es que la gente no pasa por Pozo Amarillo porque es desagradable hacerlo, porque es una calle árida, gris, de aceras estrechas, aburrida, donde apenas hay espacio para cruzarse con otros peatones... Pozo Amarillo es una calle TRASERA y así se ha querido que sea, así que el comercio no tiene cabida y poco a poco ha sido expulsado. Estando en Santa Eulalia y teniendo como destino la Plaza del Mercado es preferible para el peatón enfilar la Calle Toro y después bajar por las escaleras de la Plaza Mayor. Una noche de lluvia es mejor caminar por una calle peatonal llena de gente, actividad y bien iluminada, que por una en la que el solo caminar con un paraguas de la mano ya es un suplicio.

¿Os gusta que en el centro de Salamanca las calles sean así?



¿No sería mejor una calle Pozo Amarillo "puesta en valor"? Potenciando su actividad comercial, convirtiéndola en un lugar agradable para el peatón y más humana sin tener por qué renunciar al paso de coches pero pacificando el tráfico... Así es la Salamanca que imagino y espero que algún día pueda pasear por una calle Pozo Amarillo propia de una ciudad.



Casi lo olvidaba: Comentad lo que queráis, que siempre es bueno conocer las ideas de los demás.

lunes, 2 de abril de 2012

El Ruedo

Os voy a plantear un complicado acertijo. Echad un vistazo a esta imagen del barrio de Vistahermosa y averiguad cuál es la manzana de viviendas sociales o de promoción pública.



Complicado ¿verdad?



Me atrevería a afirmar que hay patios carcelarios con más personalidad, mayor riqueza espacial y más acogedores que la zona común vecinal interior de esta manzana residencial. Si se pretendía que la tristeza y desánimo de los vecinos afloren cada vez que se asomen a la venta, tened por seguro que se ha conseguido, eso sí: Si se pretendía que esa zona fuese un lugar de encuentro, actividad, juego, conversación, relajación, deporte... me da a mí que va a ser complicado.

El caso es que analizar y trasladar a la nuestra el modelo de las manzanas circundantes sería un error. Primero porque disponer instalaciones de costoso mantenimiento como puede ser una piscina o grandes praderas de césped sería algo incongruente ya que hablamos de vecinos de escaso poder adquisitivo y segundo (y no menos importante) porque resulta cuando menos extraño y sospechoso el "dirigismo" y la poca capacidad de decisión vecinal que se traducen en un único concepto del espacio privado común que se replica en todas y cada una de las manzanas de nuestras ciudades. El patio de manzana acaba siendo monopolizado por una piscina al aire libre que sólo se aprovecha dos meses al año en estas latitudes y por una pista de pádel (por rellenar y porque está de moda)

Así que la llevamos clara: Los "pobres" no tienen alternativa y la que se da a los "ricos" no responde al deseo común de éstos, o de responder, nadie la cuestiona.

Sigo con mi obesión: La enorme capacidad del urbanismo para transformar la sociedad en todas sus vertientes, desde la economía a las relaciones humanas. La implicación del ciudadano con el espacio que le circunda es BÁSICA (y digo implicación, no sentimiento de pertenencia a o propiedad) Esa implicación genera participación, respeto, seguridad, sinergias económicas positivas, bienestar personal y comunitario... y no hace falta estudiar arquitectura, urbanismo y sociología en Harvard para llegar a esta conclusión. Una mujer lo dice bien clarito con otras palabras en el minuto 11:35 del vídeo: "Y estamos conformes porque lo poquito que se ha hecho se nota mucho y vamos a cuidarlo porque a través de esto vamos a mirar más por esto"

Os pido por favor que lo veáis con calma, que no es muy largo, que creo que es muy interesante para entender lo que muchas veces he querido explicar aquí y que es más agradable que leer uno de mis "ladrillos"

Oasis el Ruedo from GSA Madrid on Vimeo.



Y ahora que ya lo has visto a lo mejor todavía no te habías dado cuenta de que todo esto estaba sucediendo dentro de un enorme edificio que la mayoría de salmantinos conocéis y habéis visto cada vez que habéis pasado por la M30:

http://mw2.google.com/mw-panoramio/photos/medium/841225.jpg

Otra Salamanca es posible, pero eso sólo depende de los salmantinos.